Me encanta ir al vivero, ya lo sabéis, en esta época. Ayer estuve allí y había una colección de vasijas de barro preciosas. Compre algunas y en algunas de estas imagenes me inspirare de seguro.
Entre macetero todos de barro.
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Para conseguir privacidad.
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Como dejadas al azar y dando sensación de haber pasado el tiempo.
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Me gusta!!
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Simetría.
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Varias. Sin adornos. Queda perfecta en este entorno. Las cañas, el suelo, la piscina en bruto,......
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En una cocina de acero y líneal, el barro y la silla con el mismo tono de las vasijas, aporta calidez.
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